La inversión inmobiliaria en Barcelona supera los 1.100 millones de euros en el primer semestre

El mercado inmobiliario de Barcelona ha cerrado el primer semestre con un volumen de inversión de 1.143 millones de euros. Esta cifra supone una caída del 34% respecto al mismo periodo de 2022, pero se sitúa un 9% por encima de la media registrada en los últimos cinco años.

El descenso de la inversión en Barcelona es muy inferior a la caída interanual registrada en Europa, de un 56%, con 74.300 millones de euros transaccionados. Esta tendencia es generalizada, con la mayoría de los mercados con caídas oscilando entre el 40% y el 70%. Los Países Nórdicos e Italia son los que han registrado mayores descensos de la inversión, con un 65%, seguido de Alemania y Países Bajos (-63% y -60%) y Francia y Reino Unido (-52% y -49%). En España, los volúmenes de inversión han bajado un 47% respecto a las cifras del mismo periodo del año pasado.

«La solidez de los fundamentales de Barcelona ha permitido que el mercado catalán tenga una caída menos pronunciada que la mayoría de las ciudades europeas. La estabilización de los mercados financieros y el control de la inflación provocarán una reentrada de capital en los próximos meses. Sin embargo, es posible que una gran parte de las transacciones se acaben consolidando en 2024».

El segmento de hoteles ha liderado la inversión con 462 millones de euros, duplicando la cifra registrada hasta junio de 2022 e incrementando en un 54% la media de los últimos tres años (299 millones de euros). Las principales operaciones de este semestre han sido la compraventa del Mandarin Oriental Barcelona y el Hotel Sofia Barcelona, con un valor conjunto de 380 millones de euros aproximadamente.

«El auge del segmento de lujo está siendo en Barcelona aún más notorio que en el resto de España. De hecho, los hoteles de 5* y 5*GL han aunado el 96% del total transaccionado de enero a junio.

El mercado de Barcelona ha concentrado un 33% del volumen transaccionado a nivel nacional, con cinco operaciones y rozando las 1.000 habitaciones.

El segundo segmento en volúmenes de inversión ha sido living, con 262 millones de euros. Esta cifra representa una caída del 68% respecto al primer semestre del año anterior, un periodo excepcional por el cierre de la venta de 1.500 viviendas en alquiler por parte de BeCorp a Patrizia por 600 millones de euros.

El mercado de oficinas se ha situado este semestre como el tercer asset class en volúmenes de inversión, con 76 millones de euros, prácticamente el 50% de la inversión nacional en este sector. En Barcelona, el mercado con mayor volumen de inversión ha sido una vez más el 22@ & FM, con el 37% del total invertido en la ciudad. En esta zona ha tenido lugar la venta del proyecto de oficinas ‘Binar’ a la aseguradora BanSabadell Vida, la operación de mayor volumen del trimestre. A este mercado le sigue muy de cerca el Centro Ciudad, con el 34% de la inversión, donde ha destacado la compra por parte de Meridia del edificio Océano, un complejo de oficinas de 5.500 metros cuadrados.

En cuanto al perfil del inversor del mercado de oficinas, este semestre ha predominado especialmente el inversor doméstico, acaparando un 50% de la actividad. En paralelo, las operaciones de MidCaps (con volúmenes entre uno y diez millones de euros) han ganado terreno, representando la mitad de las transacciones de este segundo trimestre.

Al segmento de oficinas le ha seguido industrial & logística, con una inversión de 149 millones de euros y una caída del 22% respecto al mismo periodo del año pasado. Retail, por su parte, ha registrado unos volúmenes de 29 millones de euros, un 82% menos que el primer semestre de 2022.

Durante la primera mitad del año ha destacado especialmente el comportamiento de la vertical de Healthcare que, si bien representa tan solo un 2% sobre el total de la inversión en Barcelona, ha crecido considerablemente en comparación con el primer semestre de 2022. En concreto, este segmento ha cerrado el primer semestre con una inversión de 22,2 millones de euros.

En términos generales, se prevé una desaceleración de la economía española en los próximos meses, con el consecuente impacto en el mercado inmobiliario, y una reactivación de la actividad de cara a los primeros meses de 2024.

 

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